Pareciera que los argentinos tenemos una especial devoción en perder el tiempo. Aun cuando este es el único recurso no renovable, lo despreciamos con profesionalismo. Es así que pasamos horas, semanas y días debatiendo el “cambio” de Cristina Fernández de Kirchner como si, acaso, una sonrisa más marcada o un tono de voz menos agudo pudieran modificar realmente a la Argentina. Robert De Niro no deja de ser él porque represente al capo mafia que se analiza en una determinada etapa de su carrera o al siniestro criminal de Cabo de Miedo en otro tiempo. El maquillaje y la cosmética, antes o después, dejan al descubierto lo que se es, sin máscara ni careta.
Leer Nota Completa
Fuente: Economía Para Todos
martes, 12 de agosto de 2008
“No estamos solos, Cristina”
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Por mas que el descerebrado K grite que no están solos, siguen dando risa. Jamás la historia Argentina va a registrar semejante vergüerza: los otrora terroristas en el Gobierno Nacional con una ineptitud de otro planeta, korrupción sin igual y destrucción total del patrimonio del suelo y mar, edilicio, institucional, educativo, etc.etc.etc., como pocas veces se verá en la historia de la Humanidad. Perdonemos a quienes los votaron: "Padre, perdónalos no supieron lo que hacían".
Censura?????
Quièn te conoce tan poderoso para censurarte!
dejate de joder!
Linda autoayuda te inventaste!!!!!!!!
Censura???JAJAJAJJJEJJEJJJAJJ!
Si te hubieran hackeado el sitio
no volvàs más...
andá cartelasito!
jajajajajajaj
agosto 30, 2008 3:24 PM
Publicar un comentario